Con la ayuda de la red de satélites que orbitan alrededor de la tierra, un GPS nos dice dónde estamos y hacia dónde tenemos que ir. ¿Cómo lo hace?
En el muy desafortunado caso de que un día te pierdas sin tener la más mínima idea de dónde te encuentras, obtener indicaciones para ubicarte puede ser realmente complicado.
Sin embargo, un smartphone con GPS o un sistema de localización vehicular en tu coche pueden sacarte del apuro. Con estos dispositivos, es fácil saber en qué punto preciso del planeta te encuentras y cómo llegar a prácticamente cualquier destino.
Al igual que un teléfono celular, un GPS se basa en ondas de radio. Pero en lugar de utilizar torres en tierra, se comunica con satélites que orbitan el planeta. Como dato curioso, actualmente hay 27 satélites GPS en órbita, 24 están en uso inactivo, y el resto está destinado a respaldo en caso de que uno u otro falle.
Pero, ¿cómo lo hace? ¿Pueden tan pocos satélites saber la ubicación de millones de personas, dispositivos electrónicos y vehículos?
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¿Cómo funciona el sistema de gps? Para determinar tu ubicación, un receptor GPS tiene que determinar dos cosas:
- Las ubicaciones de al menos tres satélites por encima de ti.
- Dónde estás en relación con esos satélites.
Luego, el receptor usa trilateración para determinar tu posición exacta en la tierra.
En otras palabras, un sistema de monitoreo satelital dibuja una esfera alrededor de cada uno de los tres satélites que localiza. Estas tres esferas se cruzan en dos puntos: uno en el espacio y otro en el suelo. El punto en el suelo donde las tres esferas se cruzan es tu ubicación.
¿Y cómo funciona el GPS en autos?
Los sistemas de navegación GPS para automóviles se pueden instalar de fábrica en vehículos nuevos o se pueden comprar como un accesorio adicional.
Combinando el uso de señales de los satélites con mapas interactivos a bordo, estos sistemas pueden trazar rutas de viaje a un destino determinado en función de una serie de variables.
Algunos de estos sistemas están interconectados con fuentes de información de tráfico, lo que les permite dar cuenta automáticamente de la congestión en la ruta y determinar las mejores opciones para llegar a un destino lo más rápido posible.
Si un conductor pierde un giro, estos dispositivos también pueden corregir rápidamente el error y presentar una opción de ruta actualizada.
Al proporcionar instrucciones de voz o visuales, estas unidades también pueden ayudar a los conductores a encontrar la estación de servicio más cercana o dar consejos sobre restaurantes o opciones de compras.
Pero eso no es todo.
Gracias al avance de la tecnología, los GPS han evolucionado pasando de ser solamente auxiliares de rastreo y ubicación, a verdaderos aliados para aumentar la seguridad de los conductores, evitar accidentes y hasta mejorar los procesos internos de una compañía para reducir costos y aumentar la productividad.
Por ejemplo, los dispositivos de última generación como Zeek GPS:
- Cuentan con un botón de pánico y bloqueo remoto de puertas para evitar un robo o incluso frustrar un secuestro.
- Permiten grabar audio y video dentro de cualquier unidad para mayor seguridad de los pasajeros o de la mercancía que se transporta en caso de tratarse de una empresa de logística.
- Emite alertas en caso de exceso de velocidad, ralentí, salida de la ruta o en caso de que el vehículo se mueva en horarios o zonas no permitidas.
- Provee reportes de funcionamiento para detectar fallas mecánicas y crea recordatorios para acudir con el mecánico, realizar cambio de aceite, acudir a la verificación, renovar el seguro, etc.
- Llevan un control del uso de combustible con el fin de reducir costos operativos.
Y muchas otras cosas más dependiendo el tipo de vehículo que posees, para qué lo utilizas, y qué necesidades específicas necesitas cubrir gracias a la logística vehicular.
Ya sabes cómo funciona el sistema de gps. Ahora es momento de diseñar uno a tu medida. Manda un mensaje y solicita una asesoría personalizada sin costo.
